lunes, 1 de julio de 2013

El Homus Emprendus, La Raza del Emprendedor.


“Si la única herramienta que utilizas es un martillo, pensaras que toda cosa que se te presente se parecerá a un clavo.” Mark Twain.

       Si algo escuchamos ahora a diario, que antes no, es la palabra emprendedor. Sabemos que el gobierno, sin importar cual sea apuesta por los emprendedores como si fueran una fórmula mágica. Los emprendedores no son ni magos, ni grandes genios, ni la solución a la crisis mundial. La palabra emprendedor significa aventurero y no es más sino que la evolución de la palabra empresario. En su origen una empresa y por definición según la R.A.E se define como "Acción o tarea que entraña dificultad y cuya ejecución requiere decisión y esfuerzo." El emprendedor es aquél que se embarca en su propia empresa, en vez de unirse a la del otro.




         Queremos ver la palabra emprendedor como algo moderno, algo nuevo, algo innovador,..., pero la realidad es que el emprendimiento es anterior a la prostitución. Salvo que haya habido un chulo de por medio, cuando la primera mujer decidió hacer un trueque de sexo por comida o lo que sea, esta mujer se convirtió en  una de las grandes emprendedoras del mundo. Con este mundano ejemplo quiero decir, que los emprendedores no son nada nuevo, ni en lo particular algo bueno para la sociedad, ni la solución mágica a los problemas económicos del mundo.

           Los emprendedores son una raza propensa a evolucionar en otra rapidamente, o no. Por ejemplo: alguien se le ocurre la idea de hacer un nuevo modelo de banco comercial, lo lleva a cabo y es exitoso. Mientras se le ocurre la idea y la está llevando a cabo, esta persona es un emprendedor, si el modelo de negocio es lo suficientemente exitoso y esta persona se mantiene sin emprender en otras actividades sino sólo a directivo de su banco entonces pasa de ser emprendedor a ser un banquero. Por poner un ejemplo más actual, hace muy poco tiempo a varias personas se les ocurrió que utilizar las redes sociales para publicitar productos y crear presencia justo en el nicho de mercado era una gran idea, estos creadores del marketing 2.0 eran grandes innovadores, siendo eran la palabra clave. Hoy, es una profesión que tiene su propio master universitario, hoy en día a estos se les llaman Comunity Managers.

¿Emprender o no emprender?, He ahí el dilema. 

            Yo creo fielmente que el emprendedor es una persona masoquista, es un aventurero, es alguien que sabe que todo se puede ir al garete en cuestión de segundos, es alguien que ha tenido fracasos significantes y es alguien que es persistente. ¿Por qué todo lo anterior?, pues por que 9 de cada 10 empresas nuevas fracasan, para los que ven el vaso medio vacío o para los no emprendedores. Por lo general, y es una prueba fácil, por que al emprendedor le dices esta estadística y te dice -Oye, pero una de cada diez empresas es exitosa, fíjate que bien -. La valoración del riesgo-recompensa en los emprendedores es distinta en base a los demás, les gusta tener más riesgo por que saben que hay más recompensa aunque su seguridad sea escasa.

       Sé que suena desalentador, pero no lo es en absoluto, sólo que es irresponsable decir que emprender es lo mejor del mundo, que somos héroes, que rompemos estadísticas y que logramos el sueño, inclusive muchos antes de los 30. Nada de lo anterior está más alejado de la realidad, el emprendedor exitoso: Es un héroe, rompe la estadísticas y alcanza satisfacción personal y monetaria en un plazo mucho menor que la del no-emprendedor (el Homus Trabajatis). El emprendedor si es exitoso, luego que lo ha logrado, obtiene por lo general esas magnificas ventajas que vienen con este trabajo: flexibilidad del horario laboral, flexibilidad de vacaciones, no tener jefe, altos ingresos, un patrimonio alto (ya que eres dueño de un negocio exitoso.), capacidad y tiempo para seguir innovando, entre otros beneficios. Por eso es que el emprendedor cuando le dicen 9 de 10 fracasan, el ve una gran oportunidad donde 1 de 10 es exitosa.

Ser un emprendedor te hace ser tu propio jefe... o no. (Cortesía de #entrepreneurfail)



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